El título dado a este estudio no es el más preciso, pero lo utilizaremos al no haber encontrado otro mejor. El término democracia es equívoco, como muchos términos del idioma vulgar. En toda colectividad humana existen dos fuerzas opuestas. Una, que podríamos llamar centrípeta, incita a la concentración del poder central, y otra, que podríamos llamar centrífuga, incita a su desintegración. Para la comprensión de este texto no es tan necesario entrar en explicaciones mayores, como que se nos permita hacer para los lectores de la Sociología una rápida exposición de las relaciones de estas fuerzas con los residuos. Estas fuerzas son esencialmente del género al que hemos dado el nombre de "persistencia de las relaciones de un individuo con otros individuos y lugares", y no de los otros géneros de la categoría llamada de los "residuos en relación con la sociabilidad".